En Opinión de El Profe: Gerardo Aguirre Encarnación y su anhelo de dirigir el Ejido de Valle de Banderas

  •  El líder social y candidato a Presidente del Comisariado, promete transparencia y rendición de cuentas.
  • Destaca que los ingresos del ejido son millonarios y la actual mesa directiva no tiene transparencia

El ejido de Valle de Banderas es un núcleo con 400 miembros y una gran extensión de tierras, es uno de los más grandes e importantes del país, más por lo que significa Bahía de Banderas, un municipio en constante crecimiento económico que además es de los destinos turísticos internacionalmente de los mejor posicionados del país, en donde para cerrar la pinza de un verdadero desarrollo, requiere del encadenamiento productivo, esto es que las amplias zonas de cultivo y ganaderas, logren verdaderamente producir los alimentos que la industria sin chimeneas consume.

Pero esto no ha sido posible debido a que históricamente la inmensa mayoría de los comisariados ejidales, se han dedicado a todo menos a producir, en lugar de buscar financiamiento y asesoría empresarial para la inversión productiva, se han limitado a vender sus parcelas, sus tierras de uso común, incluyendo prácticas de corrupción, de falta de transparencia en los ingresos ejidales; aún en este escenario adverso de estancamiento, todavía quedan ejidos precisamente como Valle de Banderas, que cuentan con zonas para cultivar y reproducir ganado, pero además tienen también una extraordinaria expectativa de impulsar proyectos de empresa ecoturísticos, que en la actualidad representarían una excelente oportunidad de obtener ingresos que beneficien a las familias de los ejidatarios, al ser dueños de la montaña.

Es en este escenario que el líder social, empresario y exregidor Gerardo Aguirre Encarnación, irrumpe en el Ejido de Valle de Banderas, como candidato a Presidente del Comisariado, apoyado por un numeroso grupo de ejidatarios cansados de la corrupción, autoritarismo y falta de rendición de cuentas de la todavía mesa directiva, que con mentiras está haciendo lo imposible para impedir su participación, lo que no les ha funcionado, primero asegurando que no era ejidatario, lo que fue totalmente aclarado, ya que la propia autoridad agraria contempla tres formas para hacerse ejidatario, una por acuerdo de asamblea, la otra por sucesión y la tercera por decisión del Tribunal Agrario, una vez promovido un juicio para demostrar el cumplimiento de requisitos, ordenando la inclusión al padrón del demandante, al que por situaciones políticas se le haya impedido su reconocimiento.

Este último procedimiento fue con el que Gerardo Aguirre Encarnación logró sumarse en el padrón del Ejido de Valle de Banderas, conformando un equipo fuerte junto con el abogado y también luchador social Darío González Flores, quien lo acompaña como candidato a Secretario y han luchado contra el orden establecido de un grupo que controla el ejido presidido por Víctor Francisco Rodríguez Cuevas, lugar desde el cual aseguran han lucrado con los activos de los ejidatarios que según lo denunciaron en una conferencia de prensa, absolutamente ninguno tiene ninguna empresa privada, que les arroje los bienes que se les observan, ya que cuando llegaron a la dirigencia ejidal no tenían nada, pero ahora cuentan con propiedades, automóviles de lujo y negocios, por lo que el hoy candidato Aguirre, lanza el reto como una de sus principales propuestas, de hacer una auditoría colegida de los ingresos, que destacó son millonarios, de los cuales no hay transparencia ante la asamblea.

Valle de Banderas cuenta con poco más de 170 hectáreas en Puerto Vallarta, que abarcan la zona del aeropuerto, de la playa Boca de Tomates, Las Juntas e Ixtapa que representan millones de pesos, que tienen cerca de 15 años en juicios de indemnización, además de que cobran el 10 por ciento del valor de los terrenos para emitir constancias ejidales para que se puedan construir una vez que se venden, pero tomando en cuenta que el ejido tiene terrenos de gran plusvalía que se han adquirido empresarios desarrolladores y fraccionadores, se están presumiendo ingresos millonarios, además de las “donaciones” o “moches” para “hacerse de la vista gorda” con los juicios.

Por lo tanto Gerardo Aguirre y Darío González aseguran la riqueza del grupo que controla el ejido proviene del cobro millonario de las constancias y otros ingresos, de los cuales únicamente reparten migajas a los ejidatarios, que revelan muchos no tienen para comer o comprar medicina, contrariamente a ellos que han mejorado su modo de vivir sin tener ningún negocio, “de dónde” se preguntan, por lo que reiteran el que forzosamente tiene que hacerse una auditoria, “yo, sí tengo con que comprobar mis ingresos a través de mis empresas” afirmó categórico el candidato Gerardo Aguirre, quien invita a los ejidatarios a no dejarse intimidar ni comprar, a que reflexionen su voto entre seguir igual o apostarle a un verdadero cambio en el Comisariado Ejidal.

Entre las propuestas de Gerardo Aguirre Encarnación para darle un giro total al Ejido de Valle de Banderas, contempla cinco ejes: no a la represión de los ejidatarios, los cuales dicen son castigados y privados de sus derechos si critican o se inconforman en la asamblea, lo que representa una violación a la libertad de expresión; promete transparencia y rendición de cuentas; integración de los ejidatarios a los distintos trabajos del comisariado; proyectos de reforestación; apostarle a los proyectos productivos ecoturísticos; impulsar los proyectos de captación de agua; adquirir un seguro de gastos médicos y de vida para los ejidatarios; gestión para el financiamiento para el campo.

Realmente lamentable lo que sucede en el Ejido de Valle de Banderas, un núcleo agrario histórico, que en la actualidad no puede postergar su inclusión al crecimiento para el desarrollo económico, a través de incentivar la productividad agrícola en coordinación con la ganadería, para lograr reactivar el sector primario y se produzca con la calidad que demanda el mercado, tanto para proveer a la industria turística y para la exportación alimentaria, tal como lo propone Gerardo Aguirre Encarnación, no siguiendo con la tendencia de la corrupción, el dispendio y la falta de transparencia en la que han incurrido sus actuales dirigentes. Al tiempo. Va.