La avispa esmeralda y su relación con las cucarachas

Uno de los eventos más escalofriantes que pueden ocurrir en el mundo de los insectos, es sin lugar a dudas el que ocurre con el ciclo biológico de la avispa esmeralda.

Para que se logren desarrollar sus larvas, la avispa esmeralda hembra busca cucarachas (Periplaneta americana), las cuales tendrán un espantoso final.

La avispa es un atacante hábil y enfocado; si su aguijón logra penetrar en una parte específica de la cabeza de la cucaracha, inyectará un veneno que la convertirá en un «zombi». En ese estado, la avispa conducirá al insecto a una madriguera que previamente ha construido, donde llevará a cabo el resto de su labor, manipulándola con una antena.

Aquí es donde comienza lo interesante. La avispa pone un huevo sobre una parte del abdomen de la cucaracha. Cuando la larva sale del huevo, esta cava un agujero en el abdomen y comienza a alimentarse, en una primera fase de los fluidos, y más tarde de los órganos internos no vitales del insecto aún con vida, sufriendo una muerte muy lenta.

Una vez culminada la etapa de desarrollo de la larva, esta emerge como avispa adulta de lo que alguna vez fue una cucaracha llena de vida.

 

Fuente: #EnséñameDeCiencia