En Opinión de «El Profe» : Apoyo a la micro, pequeña y mediana empresa, una asignatura pendiente

•  El financiamiento a emprendedores, es la única posibilidad para que las clases medias subsistan y tengan empleos
• Debe regresar la política pública, así como las instituciones de impulso y financiación de proyectos productivos
• Regalar dinero en programas sociales populistas, que únicamente vacían las arcas del gobierno, no es la solución

La única alternativa para incentivar el crecimiento y la reactivación económica, es la inversión productiva, tanto de bienes como de servicios, por lo que debe regresar la política pública, así como las instituciones de impulso y financiación de proyectos productivos para emprendedores, sin que se roben el dinero o se repartan con favoritismos, que fue el problema de su extinción durante este sexenio de AMLO, que bajó también a los Estados, ya que estas instancias eran verdaderos nidos de corrupción, Nayarit fue ejemplo de ello en el pasado cuatrienio de Antonio Echevarría, en donde a través de la Secretaría de Desarrollo Económico, desviaron millones para empresas y prestanombres de conocidos exfuncionarios públicos.

En el capitalismo únicamente hay dos formas para producir, o se cuenta con los recursos o se recurre al apalancamiento; apenas este año reinició la recuperación de las micro, pequeñas y medianas empresas, después de una devastadora pandemia, que llevó a la quiebra a miles de empresas familiares, que dicho sea de paso arrojan el 80 por ciento de los empleos en nuestro país, aunque contrariamente a lo que sucede en los países desarrollados, en una gran paradoja, son los que menos incentivos fiscales y apoyos financieros tienen, simplemente en México durante y la post-pandemia han sido abandonados a sus suerte, con exigencias fiscales y normativas muy rigurosas que no les permiten crecer, mucho menos tener acceso al financiamiento de la banca privada.

Subsidiar la producción, se refiere a brindar créditos para emprendedores, para que las micro, pequeñas y medianas empresas existentes crezcan, se fortalezcan, brindar incentivos tributarios además de normativos, para que no estén dentro de la informalidad, alentar la inversión en las empresas del sector primario, que representan los ejidos y las sociedades de producción rural, las cooperativas pesqueras, pero además vinculándolas con las instituciones de educación superior, para que sean asesorados en la cultura empresarial, de administración profesional, que produzcan y sus procesos sean con la calidad total que el mercado demanda.

También es una premisa capitalista, que a mayor crecimiento poblacional en las regiones, las necesidades son crecientes, por lo tanto siempre habrá emprendedores dispuestos a ofrecer productos y servicios que los conglomerados humanos demandan, zonas como Bahía de Banderas y Puerto Vallarta, son caldo de cultivo para las micro, pequeñas y medianas empresas, porque siempre habrá demanda a la que se tiene que satisfacer.

Aunque una economía que basa su crecimiento en el sector terciario que es el de los servicios nunca será desarrollada, porque nada más se benefician ciertas actividades económicas como el transporte y la construcción, ante un detonante como lo es el turismo, alentar la reactivación de la micro, pequeñas y medianas empresas, si es una alternativa real para fortalecer el consumo, aprovechando la derrama económica que ya de por sí representa la actividad turística.

Así que el financiamiento a emprendedores, es la única posibilidad para que las clases medias subsistan, tengan empleos, por lo tanto ingresos, que a la vez significa gasto, ahorro e inversión, en el círculo del proceso de producción, distribución, circulación y consumo, porque regalar dinero en programas sociales populistas electoreros, que nada mas vacían las arcas del gobierno, definitivamente no es la solución, es como poner un curita a alguien que requiere una cirugía mayor.

Los micro, pequeños y medianos empresarios, los prestadores de servicios turísticos que no son los “grandes”, como los restaurantes palaperos, marisquerías, taquerías, loncherías, menuderías, torterías, abarrotes, papelerías, estéticas, ferreterías, tortillerías, lavanderías, talleres mecánicos, de soldadura, carpinterías, vidrieros, pozolerías, birrierías, carnicerías, lavados de autos, estéticas, abarrotes, micelaneas, consultorios, despachos, etcétera, son la única alternativa de empleos y subsistencia de la población, por lo tanto, impulsar a este importante sector para la economía regional, continúa siendo una asignatura pendiente para los gobiernos estatal y municipal, -por lo menos. Va.