Nuevo tope en rentas de CDMX: Congreso limita incrementos según la inflación
Esta medida, impulsada con el objetivo de proteger a los arrendatarios, se basa en la necesidad de regular el mercado inmobiliario para evitar incrementos desproporcionados.
- 50 votos a favor: nuevo tope en rentas de CDMX
La reforma constitucional, que fue avalada con 50 votos a favor, introduce modificaciones al Código Civil y a la Ley de Vivienda, y busca asegurar que los incrementos de renta no superen la inflación anual.
La diputada Alejandra Valencia destacó la importancia de esta medida para proteger a los ciudadanos de menores ingresos que han sido afectados por la gentrificación y el aumento desmedido de las rentas en diversas zonas de la ciudad.
- Nuevas disposiciones para regular el mercado de arrendamiento
Dentro de las principales disposiciones aprobadas por el Congreso, se destaca la implementación de un registro digital de los contratos de arrendamiento.
Este registro permitirá un mayor control sobre las condiciones bajo las cuales se llevan a cabo los contratos de renta en la ciudad, facilitando la transparencia y el acceso a la información tanto para inquilinos como para arrendadores.
Alejandra Valencia subrayó que esta medida ayudará a evitar abusos y garantizará que las condiciones de los contratos sean justas para ambas partes.
Además, se estableció que la renta deberá fijarse en moneda nacional y solo podrá ser aumentada anualmente, tomando como referencia la inflación del año anterior.
Esta regulación pretende evitar que los arrendadores ajusten las rentas de manera arbitraria, lo que podría afectar negativamente a los inquilinos, especialmente en un contexto económico difícil.
Valencia enfatizó la importancia de que la renta esté vinculada a indicadores económicos claros y no a la discrecionalidad de los arrendadores.
- Política pública de vivienda para renta
Otra de las propuestas clave dentro de la reforma es la creación de una política pública destinada a la construcción de vivienda para renta.
Esta medida tiene como objetivo aumentar la disponibilidad de viviendas accesibles para los ciudadanos, especialmente aquellos con menores ingresos.
Alejandra Valencia hizo hincapié en que esta política permitirá al gobierno capitalino garantizar la producción de vivienda asequible, algo que ha sido una necesidad desde los sismos de 2017, cuando muchos habitantes de la Ciudad de México se vieron desplazados de sus hogares.
El debate en torno a la reforma también generó críticas por parte de la oposición, quienes señalaron que el documento carece de elementos técnicos y presenta problemas conceptuales.
Se argumentó que la reforma, aunque positiva, actúa solo como un paliativo y no aborda de manera integral los problemas de fondo relacionados con la vivienda en la ciudad.
Sin embargo, Alejandra Valencia defendió la reforma, destacando que representa un avance importante en la protección de los derechos de los inquilinos y que su implementación contribuirá a mitigar los efectos de la gentrificación.
Fuente: Dinero en imagen